Decir Juan Bosco es decir ternura. Esa ternura que sólo alguien como él podía tener para tratar a sus hermanos; esa ternura que da lugar a la disciplina y al amor simultáneamente.Hoy,recordamos a Don Bosco y les deseamos una Feliz Fiesta a todos los allegados a la gran familia salesiana. Éste es nuestro homenaje a quien en vida diera todo por los jóvenes y, confiado en María viviera un estilo muy particular, un estilo que hoy nos identifica: el estilo salesiano. " Juan nació el 16 de agosto de 1815 en Becchi (cerca de Turín, Italia) Su familia era muy humilde. A los dos años de edad muere su padre. Su madre, Margarita Occhiena, lo educa en la fe cristiana. A los 9 años, tiene un sueño profético, donde Dios le manifiesta su deseo de que se dedique a la educación cristiana de los jóvenes. Fue jornalero, aprendiz de sastre, zapatero, carpintero y repostero. Tenía un carácter alegre, de voluntad muy firme. Siendo sacerdote funda los Oratorios festivos con los que atrae a los jóvenes hacia entretenimientos sanos. Funda un asilo-escuela para niños y jóvenes, para rescatarlos de la calle y enseñarles a ganarse la vida . Crea escuelas-internados de primera y segunda enseñanza. Funda la Sociedad Salesiana (para multiplicar la obra con el espíritu de San Francisco de Sales), varias asociaciones para la formación de la juventud y de la niñez. Participa de la fundación de otra Congregación: el Instituto de las Hijas de María Auxiliadora para que la educación cristiana se extienda a las niñas. En el año 1875 envía misioneros a la Patagonia argentina. Hizo una gran aporte a la Pedagogía con su sistema Preventivo. Muere el 31 de enero de 1888. Es canonizado en 1934 por Pío XI." Y como regalo especial, les dejamos una de las frases pronunciadas repetidas veces por Don Bosco y que marca toda su vida y su trabajo apostólico: "le he prometido a Dios que hasta mi último respiro sería para mis queridos jóvenes". Amén,
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